03.02.2023

Director chileno presenta a Enrique Soro en Dallas, Texas (EEUU)

El joven director chileno Patricio Gutiérrez Vielma abrió con «Danza fantástica» de Enrique Soro la segunda parte de un programa de concierto, realizado en el Caruth Auditorium del Owen Arts Center, Dallas, Texas, Estados Unidos.

Fue así como la famosa danza de nuestro Soro se hermanó con el Danzón n°2 de Arturo Márquez y cuatro danzas de Alberto Ginastera.

Los conciertos fueron dos, uno el viernes 27 y otro el domingo 29, de enero 2023.

Nuestra fundación felicita y agradece al maestro Gutiérrez por la interesante idea de crear un programa y llevarlo a cabo, con danzas latinoamericanas que muestran una vez más la fraternidad musical a la que aspiraba Soro en su tiempo.

 

Nota: el título «Danza Fantástica» lo encontramos por primera vez en los manuscritos de «Suite per orchestra d´archi» (Suite para orquesta de cuerdas) terminada de componer en 1905, en Santiago, luego de volver de sus estudios en el Conservatorio Giuseppe Verdi de Milán. Más precisamente correspondía a la tercera parte de esta suite. En 1928, veintitrés años más tarde, vemos que Soro firma un manuscrito titulado «Danza Fantástica«, pero ahora en un formato sinfónico. No conocemos en detalle el «viaje» mental que hace su autor para pasar de un extremo al otro. Si sabemos que lo orquestal le era connatural desde sus años de juventud.

Con la perspectiva que da la historia de su vida, podemos decir que la primera DanzaF se da en el contexto de su llegada a Chile, lleno de ilusión por participar en la construcción de un ambiente musical más rico, más amplio, más profundo para Chile. La última DanzaF se da en un contexto totalmente diferente, Soro es en ese momento un músico en plena madurez, a cargo del Conservatorio más importante de Chile y en la plenitud de sus condiciones como músico, sin embargo sometido a la triste situación de ser obligado a renunciar a su cargo como director.

Conjeturo que poder terminar esta «segunda DanzaF» le permitió sentir que pese a lo ocurrido administrativamente su potencia como músico seguía vibrando en su interior.